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(★) Argentina.- ¿Qué queda cuando el Estado desmantela la memoria y criminaliza la protesta? La respuesta está en las calles, tejida con los hilos de la resistencia colectiva.
Los organismos de derechos humanos, junto a un amplio arco de organizaciones sindicales, sociales, políticas y estudiantiles, convocan para el 11 de diciembre a una masiva movilización en Plaza de Mayo bajo la consigna "Con los pañuelos blancos como bandera". La jornada, en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos y a dos años del inicio del gobierno de Javier Milei, busca defender las políticas de Memoria, Verdad y Justicia frente al desmantelamiento estatal.
La convocatoria multisectorial incluye a Abuelas de Plaza de Mayo, Madres Línea Fundadora, Familiares de Desaparecidos, Hijos-Capital, CTA, ATE, movimientos sociales como UTEP y La Poderosa, y agrupaciones políticas diversas. El acto central contará con las intervenciones de Estela de Carlotto, Taty Almeida y Adolfo Pérez Esquivel, símbolos vivos de la lucha contra la impunidad.
Esta movilización adquiere especial relevancia ante el informe lapidario del Comité contra la Tortura de la ONU, que alerta sobre el debilitamiento de los controles sobre las fuerzas de seguridad, el protocolo antipiquetes que restringe el derecho a la protesta, y la falta de investigaciones sobre abusos policiales. El organismo internacional también expresó consternación por el desmantelamiento de equipos que investigaban los crímenes de la dictadura.
La contrahegemonía se construye en esta articulación entre la memoria histórica y las luchas presentes: desde la economía popular que tendrá su feria en la plaza, hasta la resistencia frente a las políticas que buscan reducir la edad de imputabilidad penal. Los pañuelos blancos, símbolo de las Madres y Abuelas, se transforman ahora en bandera de un movimiento amplio que defiende los derechos humanos como proyecto colectivo frente al individualismo neoliberal.