viernes, 28 de noviembre de 2025

AMENAZAS NEONAZIS SACUDEN A LA UNIVERSIDAD PÚBLICA

| ★ POLÍTICA |

(★) Argentina.- La UNLP enfrenta una escalada de intimidación digital mientras docentes y estudiantes resisten la campaña de terror

La Universidad Nacional de La Plata vive horas de tensión tras recibir una serie de amenazas de masacre que obligaron a evacuar la Facultad de Artes y activar protocolos de seguridad en múltiples unidades académicas. Los correos anónimos, firmados bajo el alias de la Red 764 -un grupo neonazi con antecedentes internacionales-, describían planes de tiroteo inminente con un escalofriante mensaje: "No hay vuelta atrás, no va a quedar ni une vive".
La intimidación se expandió como mancha de aceite por las facultades de Arquitectura, Ciencias Médicas, Jurídicas y Sociales, y Humanidades, generando un operativo triangular de seguridad que involucró a fuerzas provinciales y federales. Las autoridades universitarias rompieron el silencio con una denuncia urgente mientras ADULP, la agremiación docente, salió al cruce: "Sabemos que quieren implantarnos el miedo", advirtieron en un contundente comunicado que repudia el amedrentamiento sistemático.
Detrás de la firma 764 se esconde un fenómeno digital descentralizado que emerge desde foros estadounidenses, mezclando estética satánica, discursos de odio y técnicas de captación de menores a través de plataformas como Discord y Telegram. Aunque las investigaciones preliminares sugieren que podría tratarse de imitadores más que de una célula organizada, la dispersión no reduce el riesgo: cada amenaza virtual carga el potencial de convertirse en tragedia real.
La comunidad universitaria platense enfrenta así no solo la vulnerabilidad física sino el desafío de defender los espacios de educación pública frente a nuevas formas de violencia política. Mientras las actividades se suspenden y la investigación avanza, queda en evidencia que los ataques a la universidad pública adoptan hoy rostros digitales pero conservan viejos objetivos: sembrar el pánico y fracturar la convivencia democrática.