| ★ POLÍTICA | LAS COSAS CLARAS |
(★) Colombia.- El mandatario colombiano Gustavo Petro se planta contra el avance de la derecha ultraconservadora en el continente.
La victoria de José Antonio Kast en Chile ha abierto un nuevo frente político en América Latina, con el presidente Gustavo Petro como principal crítico del ascenso de la derecha ultraconservadora. Mientras otros mandatarios progresistas como Lula da Silva, Claudia Sheinbaum y Pedro Sánchez reconocieron el resultado electoral chileno, Petro adoptó una postura radicalmente diferente, calificando a Kast como "nazi" e "hijo de nazi" en sus redes sociales.
El mandatario colombiano no sólo se negó a felicitar al presidente electo chileno, sino que lanzó duras advertencias sobre el peligro que representa su triunfo para la región. "El fascismo avanza, jamás le daré la mano a un nazi y a un hijo de nazi tampoco; son la muerte en ser humano", escribió Petro, comparando el momento actual con la dictadura de Pinochet. Esta posición contrasta marcadamente con su habitual discurso de respeto a la soberanía de otros países, sin embargo no lo es. La democracia no es sólo votar. Es también asegurar la posibilidad de que el pueblo pueda expresarse y luchar por sus intereses. Es por esto, que en este caso, su postura ha sido clara y contundente.
La reacción de Petro refleja una profunda preocupación por el resurgimiento de proyectos políticos que se consideran amenazantes para los derechos humanos y la democracia en la región. Su firme postura contrasta con la hipocresía que domina en los espacios diplomáticos, marca una línea clara de resistencia frente a lo que percibe como un retroceso histórico para las fuerzas progresistas latinoamericanas.