| ★ UNA FECHA COMO HOY |
(★).-Un hito histórico que marcó el inicio de la primera revolución socialista triunfante en el mundo
El 6 de noviembre de 1917 (25 de octubre según el calendario juliano entonces vigente), las masas trabajadoras rusas escribieron una página imborrable en la historia de la lucha de clases. La toma del Palacio de Invierno en Petrogrado no fue simplemente un asalto a un edificio, sino el símbolo del derrumbe del régimen zarista que durante siglos había oprimido al pueblo ruso.
El contexto de la insurrección
La Rusia zarista se encontraba sumida en una profunda crisis estructural. La Primera Guerra Mundial había desangrado al país, mientras la aristocracia y la burguesía continuaban acumulando riquezas a costa del hambre y la miseria del pueblo. Los campesinos sin tierra, los obreros explotados en las fábricas y los soldados enviados a morir en el frente conformaban una masa social que ya no podía soportar más la opresión.
La estrategia revolucionaria
Los bolcheviques, bajo el liderazgo de Lenin y Trotsky, comprendieron que el momento histórico exigía una acción decisiva. No se trataba de esperar reformas desde arriba, sino de tomar el poder directamente. El Comité Militar Revolucionario, controlado por los bolcheviques, coordinó la insurrección que comenzó en la noche del 6 de noviembre.
El asalto final
El Palacio de Invierno, residencia del Gobierno Provisional burgués de Kerensky, estaba defendido por cadetes militares y el batallón femenino. Pero la fuerza del pueblo organizado resultó imparable. Los marinos de Kronstadt, los guardias rojos y los soldados que se habían pasado al lado revolucionario rodearon el palacio. Tras horas de tensión y algunos enfrentamientos, las fuerzas revolucionarias tomaron el edificio prácticamente sin resistencia.
Significado histórico
Este acontecimiento demostró que cuando las masas se organizan y toman conciencia de su poder, pueden derribar incluso los regímenes más aparentemente sólidos. La Revolución de Octubre abrió un nuevo capítulo en la historia de la humanidad: por primera vez, la clase trabajadora tomaba el poder estatal para construir una sociedad sin explotadores ni explotados.
A 108 años de aquella gesta, el recuerdo de la toma del Palacio de Invierno nos recuerda que la lucha por la emancipación social sigue vigente. En un mundo donde el capitalismo continúa generando desigualdades, guerras y destrucción ambiental, la experiencia soviética temprana mantiene su valor como referencia para quienes creemos que otro mundo es posible.